Captamos postales de biciusuarios movilizándose en bicicleta por calles del centro de Guayaquil. Nuestro vehículo favorito sirve como medio de transporte para trabajar y otras tareas.
La bicicleta se sigue utilizando en Guayaquil como medio de transporte para ir al trabajo, trasladar mercancías y otras tareas. Se lo hace sin contaminar ni congestionar.
Salimos a capturar esta realidad, beneficiosa para nuestras ciudades, en el centro de la urbe. Confirmamos que se utiliza la ciclovía, pese a que la actual administración del Municipio de Guayaquil no ha invertido en mantenimiento, mejoras y ampliación.
Incluso, existen las críticas del propio alcalde Aquiles Alvarez, quien ha dicho erróneamente que ‘nadie usa la ciclovía’ o que está ‘mal diseñada’. A esto se suma el escaso control que la Agencia de Tránsito y Movilidad (ATM) realiza para evitar el irrespeto a la infraestructura ciclista.
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En los bajos de la propia Alcaldía, vehículos motorizados públicos y privados invaden la ciclovía. Durante nuestro recorrido vimos que se han colocado vallas que impiden la circulación por ese carril de biciusuarios.
Pese a esta situación adversa, nos alegra ver que la bici se sigue utilizando para labores cotidianas y traslados de mujeres y hombres, de todas las edades y clases sociales.
Nuestra ciudad merece una red de ciclovías seguras e interconectadas con los equipamientos urbanos (Universidades, centros médicos, mercados, escuelas, etcétera), calles con velocidades bajas (menos de 50 kilómetros por hora en zonas urbanas), así como veredas amplias y con accesibilidad universal.
Les compartimos las imágenes captadas por Alberto Hidalgo y Nelson Mena, del equipo de Masa Crítica Guayaquil:
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